En las últimas semanas he tenido la oportunidad de notar que Guatemala como país, tiene un mayor potencial de crecimiento del que pensaba. Siempre he considerado que ciertas riquezas y recursos que se poseen, son suficientes para terminar con el subdesarrollo y sus problemas.
En este año que recién comienza, me gusta la idea de ser un ciudadano ejemplar, un ciudadano que cumple con todas sus obligaciones, espera y exige lo mismo del resto. Sé que el primer pasó para cambiar Guatemala, alejandola de los problemas que la aquejan, radica en cada una de las personas que vivimos en ella.
A pesar de que sea siempre más fácil seguir la corriente, la corriente política, social y cultural de este país, lejos de hacernos mejorar y avanzar, nos ha hecho seguir igual, con relativos avances producto en general de ciudadanos que han decidido marcar tendencia y buscar una mejora en su entorno.
Debemos ser ejemplo de ciudadanos, siendo capaces que seguir siendo tan carismaticos y entusiastas como siempre, de ser alguien digno de imitar por ser un buen ejemplo, y alguien cuya palabra es más que una promesa.
Somos quienes padecemos los problemas sociales, culturales y ni hablar de los políticos, producto de hacernos de la vista gorda, y pensar que porque hoy no nos afecta, nunca nos afectara; aún cuando tarde o temprano lo hará, y diremos que la culpa es de otros que no han actuado, a pesar de que formamos parte del mismo grupo.
Elijo ser parte de la solución y no del problema, y no tengo miedo de exigir a aquellos que me rodean, a quienes quiero y respeto, el que formen parte de la solución; que dejen de hacerse de oídos sordos y palabras silenciosas, que denuncien cuando haya que hacerlo y que cumplan de la misma forma con todas aquellas obligaciones que la vida incluye.
El ser millonario no es sinónimo de ladrón, igual que ser pobre no es sinónimo de honrado; de igual forma, todos somos políticos de una u otra forma, y eso no nos hace deshonestos, y por lo mismo, todos tenemos la oportunidad de ser una gota dentro de un vaso, una gota que contagia a las demás, con el sólo hecho de ser un ejemplo.
Todos podemos aportar, cada quién dentro sus actividades diarias, siendo positivos, actuando correctamente, exigiendo lo mismo de todo aquel que nos rodee, ¿porque si no lo hacemos nosotros quién lo hará?
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